El concepto
de obesidad metabólicamente saludable, se refiere a cuando una persona con
índice de masa corporal superior (IMC) a 30, no tiene factores para desarrollar
“síndrome metabólico” y por lo tanto riesgo para enfermedad cardiovascular. Hasta
un 35% de las personas con obesidad pueden ser metabólicamente saludables. Sin embargo
no existen en la actualidad criterios universalmente aceptados para su
definición ni de los mecanismos responsables
para éste fenotipo de obesidad. No hay duda que sería muy útil poder
identificar a éste subgrupo de personas para poder mejorar el tratamiento según
el perfil metabólico de la persona. Desde el punto de vista de la salud
pública, se necesitan mejores métodos para identificar qué personas con
obesidad, enfrentan un mayor riesgo para diabetes y enfermedades del corazón.
Las personas
obesas metabólicamente saludables, tienen menor circunferencia de la cintura, menor
resistencia a la insulina, son “obesos en forma”, sin embargo no hay valores de
corte estandarizados para identificarlos. Los resultados de algunos estudios
han sido variables, ya que algunos individuos no se les aprecian ningún aumento
en el riesgo en comparación con los de peso normal, otros sugieren que hay un
riesgo intermedio o que el riesgo es similar a las de las personas con obesidad
y con factores de riesgo para síndrome metabólico.
Lo que si
queda muy claro y así se concluye en muchos estudios, es que el IMC por sí solo
no es suficiente para estimar el riesgo de enfermedad metabólica o de
mortalidad. La medición de la circunferencia de la cintura sería más
informativa, especialmente en aquellas personas normales o con obesidad
moderada.
Los estudios
de resonancia magnética han encontrado que los individuos obesos
metabólicamente saludables tienen más grasa subcutánea, menos grasa visceral, y
menos grasa en el hígado y musculoesquelético.
Un estudio
reciente publicado en línea el 27 de agosto 2013 por la revista Journal of
Clinical Endocrinology & Metabolism, en donde los pacientes (668 con IMC mayor a 30 y 1372 con IMC menor a
30) fueron clasificados a ser metabólicamente saludables o no sobre la base de
5 definiciones de salud metabólica (presión arterial, triglicéridos, colesterol
LDL, colesterol HDL, colesterol total, glucosa y evaluación de HOMA que es una
medida de resistencia a la insulina). También se determinaron marcadores inflamatorios
de fase aguda (adipoquinas, citosinas proinflamatorias y recuentos de células
blancas). En general los pacientes obesos metabólicamente sanos tuvieron
niveles más bajos (por debajo de la media) en los marcadores inflamatorios en
comparación con sus pares metabólicamente no saludables y no obesos. Los
resultados sugieren que la reducción del estado inflamatorio aumenta la probabilidad
de salud metabólica, sobre todo entre los sujetos con obesidad. De tal forma
que los marcadores inflamatorios pueden ofrecer una estrategia para identificar
a las personas que más se podrían beneficiar de las intervenciones médicas.
Sin embargo
falta más investigación para medir el impacto o beneficio del tratamiento
específico en base a la estratificación entre pacientes metabólicamente sanos
vs metabólicamente no saludables, su análisis de costo/beneficio y evaluar las
diferencias según la edad, sexo y raza.
Lo más
importante es no perder de vista la importancia de prevenir la obesidad en
primer lugar ¿no lo creen?